domingo, 31 de marzo de 2013

Principios de la Interpretación Bíblica, Parte III


LA NECESIDAD DE SABER COMO DIOS DECLARA SU VERDAD

En la Biblia hay por lo menos seis tipos de declaraciones: (a) la imperativa, (b) la declarativa, (c) la interrogativa, (d) la condicional, (e) la expectativa, y (f) los relatos de acción. Es mediante el uso de estos distintos tipos de declaraciones que Dios ha comunicado Su mensaje al hombre.

Nadie puede entender la Biblia sin comprender por lo menos algo de estos varios tipos de declaraciones y cómo son usadas en la Biblia. Para ser un buen estudiante de la Biblia uno debe entender: (a) que hay por lo menos seis tipos de declaraciones usadas en la Biblia, (b) que, en cierto sentido, hay algo único en cada una de ellas, y (c) que, a pesar de esa unicidad de cada una de ellas, todas comparten una característica en común usada (a veces) por el Espíritu Santo para mostrar que una acción es obligatoria (o positiva o negativamente) para los hombres hoy.

Un pasaje relevante para considerar. Detengámonos a analizar brevemente un intercambio que hubo entre dos conocedores de la palabra de Dios en un encuentro sin precedentes que se dio como ejemplo para quienes deseamos aprender a manejar con precisión la palabra de verdad: Mateo 4:1-11.

En la primera tentación el diablo dijo: “Si eres Hijo de Dios, di que estas piedras se conviertan en pan” (Mat. 4:3). Resistiendo a la tentación Jesús le dijo: “Escrito está: "NO SOLO DE PAN VIVIRA EL HOMBRE, SINO DE TODA PALABRA QUE SALE DE LA BOCA DE DIOS” (Mat. 4:4).

De modo que, el diablo lo llevó a la ciudad, y poniéndolo sobre el pináculo del templo le dijo: “Si eres Hijo de Dios, lánzate abajo, pues escrito está: ‘A SUS ANGELES TE ENCOMENDARA’, y: ‘EN LAS MANOS TE LLEVARAN, NO SEA QUE TU PIE TROPIECE EN PIEDRA’” (Mat. 4:6). Resistiendo a la tentación Jesús dijo: “También está escrito: "NO TENTARAS AL SEÑOR TU DIOS” (Mat. 4:7). En esta tentación el diablo citó de Salmos. Resistiendo a la tentación Jesús citó de Deuteronomio. Esto constituye una prueba de que para entender un pasaje específico, uno debe: (a) analizar cuidadosamente (en cuanto al significado de las palabras como a su sintaxis) la declaración específica misma, (b) razonar cuidadosamente el contexto inmediato (lo que está inmediatamente antes y después) de la declaración específica bajo consideración, y (c) el contexto remoto (las declaraciones en el resto de la Biblia que son relevantes a la declaración específica bajo consideración).

¿Qué debe concluirse tomando en cuenta lo anterior? De lo anterior debe concluirse que toda la instrucción bíblica es aplicable (relevante) para los hombres hoy (1) en principio o (2) en detalle específico.

(1) Toda la Biblia es relevante en principio para los hombres hoy. Pablo dijo: “Toda Escritura es inspirada por Dios y útil para enseñar, para reprender, para corregir, para instruir en justicia, a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, equipado para toda buena obra” (2 Tim. 3:16-17). Este pasaje claramente enseña que toda la Escritura es útil para la doctrina. Sin embargo, debe reconocerse que las Escrituras del Antiguo Testamento no son obligatorias en cuando a detalles específicos para los hombres hoy en día. Este es el caso porque el pacto antiguo (incluyendo los Diez Mandamientos, 2 Cor. 3) fue clavado a la cruz (fue anulado, quitado, Col. 2:14). Los hombres que hoy en día son hijos (espirituales) de Dios no son hijos del pacto antiguo sino del nuevo (Gal. 4:21-31). Fue necesario que Cristo quitara el primer pacto (el antiguo) para establecer el segundo (el nuevo) (Heb. 10:9; comp. 8:8-10).

Así que, dos afirmaciones han sido realizadas en este punto: (1) Toda la Escritura es útil para la doctrina y (2) el antiguo pacto ha sido anulado, y de este modo sus estipulaciones específicas (por ejemplo, el ofrecimiento literal de sangre de animales en la adoración a Dios) no constituyen una obligación ni una opción para los hombres hoy.

Si estas dos afirmaciones son verdaderas (y lo son), ¿entonces en qué sentido las Escrituras del Antiguo Testamento tienen relevancia para los hombres hoy? Ellas son relevantes (tienen vigencia—o son obligatorias u opcionales) en principio. El apóstol Pablo dejó claro esto cuando dijo: “Porque todo lo que fue escrito en tiempos pasados, para nuestra enseñanza se escribió, a fin de que por medio de la paciencia y del consuelo de las Escrituras tengamos esperanza” (Ro. 15:4). Muy obviamente, ya que la ley de Moisés (el convenio) fue clavada a la cruz, Pablo no está diciendo que los hombres hoy tengan que aprender y obedecer las obligaciones específicas y las prohibiciones expuestas en la ley. Sin embargo, él quiere decir que ya que el Señor es inmutable (nunca cambia en Su naturaleza básica, Heb. 13:8) al estudiar cómo Dios reaccionó a las actitudes y necesidades de varios hombres descritos en el Antiguo Testamento, los hombres de hoy en día pueden aprender en principio cómo Dios reaccionará a sus actitudes y necesidades bajo el Nuevo Pacto.

Pablo siguió clarificando este tema cuando, refiriéndose a varios eventos de la historia de los israelitas, dijo: “Estas cosas sucedieron como ejemplo para nosotros, a fin de que no codiciemos lo malo, como ellos lo codiciaron” (1 Cor. 10:6). Luego Pablo también dijo: “Estas cosas les sucedieron como ejemplo, y fueron escritas como enseñanza para nosotros, para quienes ha llegado el fin de los siglos” (1 Cor. 10:11).

Los hombres hoy en día no están sujetos a las instrucciones específicas bajo las cuales estaban los israelitas pero de estos pasajes deberían aprender que: (a) Dios nunca, durante el período de vigencia de cualquier pacto, ha tolerado que el hombre rehúse obedecer las instrucciones que Él ha dado a cierto individuo, grupo o nación y (b) que Dios no tolerará el rechazo del hombre a obedecer durante el período del Nuevo Pacto (desde el primer día de Pentecostés seguido a la resurrección de Jesús de entre los muertos hasta que Él vuelva, Hch. 2; 1 Cor. 15; Mat. 28:18-20). Es por esto que en el Nuevo Testamento el Espíritu Santo usa las descripciones de ciertas acciones de varios personajes del Antiguo Testamento para ilustrar ciertas actitudes y acciones que son obligatorias para los hombres hoy en día (a saber, bajo el Nuevo Pacto) (1 Cor. 10:6, 11; Heb. 11).

(2) Aunque es cierto que toda la Escritura es aplicable (relevante en principio) para los hombres de hoy en día, ese no es el caso en asuntos de detalles específicos. Aunque es cierto que todos los hombres hoy en día pueden aprender (principios) de los varios acontecimientos dados en las vidas de personas tales como Adán, Eva, Caín, Abel, Noé, Abraham, de este hecho no debe concluirse que cualquier persona de nuestros días será considerado como alguien obediente a Dios si él o ella (1) Rehúsa comer del árbol en el centro del huerto de Edén, (2) ofrece sacrificio de animales, (3) construye un arca de madera de gofer con las especificaciones de Génesis 6, (4) deja su país para viajar hasta un lugar especificado por Dios mismo, (5) ofrece a su hijo como sacrificio a Dios. Estas instrucciones no aplican en cuanto a su detalle específico a ninguna persona de nuestros días. 

viernes, 29 de marzo de 2013

Principios de la Interpretación Bíblica, Parte II


Debemos volver a enfatizar que todos los hombres, habiendo sido creados por Dios con mentes inteligentes (capaces de reconocer, observar y considerar apropiadamente la evidencia que Dios les ha dado) están obligados ante Dios a llegar únicamente a las conclusiones que estén garantizadas por la evidencia. Ya hemos indicado que el razonamiento lógico no es la respuesta para todo. La lógica es necesaria para una vida correcta, pero la lógica sola ciertamente no es suficiente para esa vida. El razonamiento correcto tiene su lugar y la emoción también tiene el suyo. Pero tanto el razonamiento como la emoción deben basar su contenido en la revelación de Dios, la Biblia (Jer. 10:23; 2 Tim. 3:16-17). Ni la vida puramente intelectual ni tampoco la vida puramente emocional son adecuadas por sí solas. Ambas son necesarias pero ambas necesitan la revelación de Dios.

Lo que aún queda por hacer. Íntimamente relacionados (y cruciales para el problema total de la hermenéutica bíblica) están los problemas de la lógica los cuales son: verdad, conocimiento y autoridad.

(a)   Verdad. La verdad de Dios (la Biblia) es absoluta (objetiva) y está a nuestro alcance (puede ser aprendida) (Jn. 8:32). La verdad de Dios es necesaria (uno debe conocerla y obedecerla para ser salvo) (Heb. 11:6; Jn. 8:24; 20:30-31), y es exclusiva—es el único camino para llegar a la salvación (Mat. 7:13-14; 21-23; 2 Tes. 1:7-9). La verdad de Dios es poderosa (puede salvar almas, es capaz de transformar la vida terrenal y puede salvar eternamente en el cielo) (Ro. 1.16-17; Mr. 10:28-30; 2 Pe. 1:5-11; Filp. 4:4-7; Apo. 2:10). La verdad es valiosa (uno es sabio cuando paga el precio necesario para creer y obedecer, y es insensato cuando rechaza la verdad por el mundo) (Mat. 16:26; Mr. 9:43-50; Prov. 23:23).

(b)   Conocimiento. Decir que uno posee conocimiento de, digamos, una proposición, un objeto, o un cierto estado de cosas, es decir que se tiene una certeza tal como para que no sea posible estar equivocado acerca de ese tema en particular.

Una afirmación básica del cristianismo es que uno puede saber que, para ser salvo del pecado, debe creer, amar y obedecer al Señor Jesucristo. El siguiente argumento es algo repetitivo pero deja claramente establecido cómo uno puede adquirir el conocimiento de la salvación.

1.       Si uno puede saber: (1) Que Dios existe, (2) que la Biblia es Su palabra, y (3) que la Biblia enseña que para ser salvo del pecado uno debe creer, amar y obedecer al Señor Jesucristo, entonces uno puede saber que, para ser salvo del pecado, debe creer, amar y obedecer al Señor Jesucristo.

2.       Uno puede saber (1) que Dios existe, (2) que la Biblia es la palabra de Dios, y (3) que la Biblia enseña que para ser salvo uno debe creer, amar y obedecer al Señor Jesucristo. Este es el caso porque Dios es infinito (en bondad, al igual que en todos sus demás atributos) y, por consiguiente, Él no miente (Heb. 6:18; Tito 1:2; 1 Sam. 15:29). Ya que Dios no miente y ya que la Biblia es Su palabra, entonces uno puede saber que lo enseñado por la Biblia es algo verdadero. Ya que este es el caso, entonces cuando uno aprende que la Biblia enseña una cierta proposición (por ejemplo, que para ser salvo uno debe creer, amar y obedecer al Señor Jesucristo), entonces uno puede saber que esa proposición es verdadera.

Así que la Biblia es un medio no sólo para adquirir una “probabilidad” sino para obtener el verdadero conocimiento. Ya que la Biblia enseña que Jesucristo se levantó de entre los muertos (Hch. 2:24; 1 Cor. 15:12-19), entonces los hombres pueden saber que Él se levantó de entre los muertos. No hay posibilidad alguna de que los hombres alguna vez aprendan que Él no resucitó (Hch. 2:14-36; 1 Cor. 15:1-8; 12-19; Ro. 1:4). Este tema es verdaderamente crucial para desarrollar un método apropiado de estudio bíblico.

(c). Autoridad. Para agradar a Dios en nuestras obras y/o en nuestra adoración, se debe hacer únicamente lo que Dios (en Su palabra) autoriza al hombre que haga. Dios nunca le ha permitido al hombre (con aprobación divina) que haga lo que a él (al hombre) le agrada (Heb. 5:8-9; 2 Tes. 1:7-9; 2 Jn. 9-11). Dios nunca le ha permitido al hombre escribir su propia Biblia (La Biblia fue inspirada por el Espíritu Santo, 2 Tim. 3.16-17; 2 Pe. 1:20-21; 1 Cor. 2:9-13). Para agradar a Dios el hombre debe hacer lo que Dios le ha instruido que haga. El hombre no debe hacer lo que Dios no le ha instruido que haga. El hombre no debe añadir a la palabra de Dios (haciendo así lo que Dios no ha autorizado, Deut. 4:2; 1 Cro. 15:1-15; Lev. 10:1-2; 2 Jn. 9-11; Apo. 22:18). El hombre no debe quitarle cosas a la palabra de Dios (dejando así de hacer lo que Dios le ha instruido y/o prohibiendo algunas cosas que Dios le ha permitido hacer al hombre, 1 Tim. 4:1-5). El hombre no debe obligar a otros a hacer lo que Dios no ha mandado a hacer (forzando así a los demás a hacer lo que Dios no les ha requerido, Gál. 2:3-5).

Un ejemplo de esto es cuando Jesús enseñó que el creyente no es salvo hasta que sea bautizado (Mr. 16:16), muchas personas rechazan esa enseñanza simplemente porque ellos sienten que tienen el derecho de afirmar que la salvación precede al bautismo y no lo necesita. Otro caso lo tenemos cuando el Nuevo Testamento autoriza cantar en la adoración a Dios, pero no autoriza el uso de instrumentos mecánicos de música en la adoración, muchos se sienten con la libertad de añadir eso a la adoración. Deberían leer pasajes como Levítico 10:1-2; 1 Crón. 15:1-15 (pasajes del Antiguo Testamento que enfatizan el principio) y 2 Juan 9-11 y percatarse del peligro de estas presuntuosas adiciones.

La Biblia autoriza creer y actuar en estas maneras: (1) Por declaración directa, (2) por implicación, y (3) por ejemplo aprobado de acción.

El cristianismo es la religión de la autoridad bíblica y ésta involucra básicamente lo siguiente: (1) La totalidad de las declaraciones explícitas de Dios (la Biblia entera); (2) la enseñanza implícita de Dios (la cual el hombre debe inferir—mediante el uso apropiado de la lógica—de las declaraciones explícitas de Dios); (3) la objetividad, asequibilidad, necesidad, exclusividad y autoridad de la verdad; (4) el conocimiento de la verdad, y (5) funcionar solamente en la manera en la que Dios lo ha autorizado (por medio de Su palabra, la Biblia). 

domingo, 24 de marzo de 2013

Principios Básicos de la Interpretación Bíblica


¿Qué hay involucrado en cualquier problema de interpretación bíblica? Antes de que alguien pueda ser un buen estudiante de la Biblia (es decir, alguien que interprete con precisión el mensaje de Dios para el hombre), él debe entender que los elementos constituyentes de la situación total  involucrada en la interpretación bíblica (la hermenéutica) son: (1) La evidencia total (la que pretende ser el soporte de las conclusiones que se van a obtener y/o a asegurar. (2) El manejo de esa evidencia, y (3) Las conclusión(es) obtenidas de la evidencia a través de su apropiado manejo.

La importancia de la lógica para el estudiante serio de la Biblia. Aunque el estudio diligente, honesto y dirigido por la oración es esencial para que alguien llegue a convertirse y a mantenerse como un buen estudiante de la Biblia, la lectura sola de la Palabra no es suficiente para garantizar que uno entenderá lo que la Biblia enseña. No es suficiente llegar a memorizar la Biblia entera. Para asegurarse de saber lo que la Biblia dice él debe conocer cuáles son las declaraciones explícitas (las declaraciones que no necesitan deducción para comprenderlas las cuales se encuentran en la Biblia desde Génesis hasta Apocalipsis). Pero luego de aprender lo que la Biblia dice, uno debe aprender lo que la Biblia significa. Esto sólo puede aprenderse únicamente razonando correctamente acerca de lo que la Biblia dice.  En otras palabras, para aprender lo que la Biblia significa uno debe aplicar correctamente los principios de la lógica a la totalidad de las declaraciones que se haya en toda la Biblia.

Sin la lógica habría cosas que no podríamos conocer tales como: (1) Que Dios existe, (2) Que Él es Infinito en sus atributos, (3) que la Biblia es la palabra de Dios, (4) que Jesucristo es el Hijo de Dios, (5) que Él resucitó de entre los muertos y muchas otras convicciones fundamentales del cristianismo. Y es que los hombres han sido exhortados a “examinar” todas las cosas (1 Tes. 5:21). Para ser noble, uno debe investigar en las Escrituras para determinar que lo enseñado es correcto (Hch. 17:11). Esto requiere el uso de la lógica (los principios del razonamiento válido).

La evidencia a tomarse en cuenta. En este estudio utilizaremos el término evidencia como sinónimo con la expresión “el contexto total” y el “contexto total” se va a referir a lo que está compuesto por: (1) la declaración específica bajo consideración, (2) el contexto inmediato de esa declaración, y (3) el contexto remoto de esa declaración. Es importante entender el significado de estas tres expresiones.

(1) La declaración específica. Hay un cierto número de diferentes tipos de declaraciones usadas en la Biblia. Cada una de ellas se usa para mostrar que alguna cosa es esencial (obligatoria) para los hombres hoy. “Declaración específica” se usará para referirse a un solo pasaje (frecuentemente será una sola oración) la cual será puesta bajo consideración de si ésta contiene alguna acción obligatoria para los hombres hoy.

(2) El contexto inmediato. La expresión “contexto inmediato” se va a referir al material inmediatamente antes e inmediatamente después de la declaración específica.

(3) El contexto remoto. La expresión “contexto remoto” se refiere a todo lo que sea relevante (de importancia) en cuanto a la “declaración específica” aparte de la “declaración específica misma” y del “contexto inmediato”.

(4) El contexto total. Esta expresión se refiere a todo lo que involucran las tres partes anteriormente mencionadas: la “declaración específica”, el “contexto inmediato” y el “contexto remoto”.

(5) El manejo de la evidencia. Para interpretar con precisión la Biblia, no es suficiente que simplemente se sepa que la evidencia existe —uno debe interpretar correctamente esa evidencia. Esto significa que uno debe tener algún método, alguna manera de manejar la evidencia.

Básicamente sólo hay dos alternativas en cuanto a cómo escoge alguien reaccionar ante la evidencia: (1) él puede escoger ser alguien racional o, (2) puede escoger ser alguien irracional.

Lo que significa ser racional. La ley de la Racionalidad (algunas veces llamada la Ley de la Razón Suficiente) dice que los hombres deben justificar sus conclusiones con evidencia adecuada. O se puede expresar de esta manera: uno debe llegar solamente a aquellas conclusiones que estén apoyadas por la evidencia. Adicional a esto, quien escoge ser racional debe: (a) afirmar que la verdad es objetiva (no subjetiva) y, de este modo, no cambia por los estados mentales del sujeto que la conoce. (b) afirmar que la verdad objetiva puede ser aprendida, lo cual significa que la verdad no es un misterio al alcance de unos cuantos sino que la misma está disponible y al alcance de todos quienes merezcan encontrarla (Mr. 4:11). (c) afirmar que hay una relevancia vital entre la evidencia y las conclusiones, éstas últimas se obtienen de lo primero. (d) negar que la fe cristiana sea “un salto a la oscuridad” (es decir, ser racionales es negarse a aceptar conclusiones que no estén respaldadas por la evidencia pertinente). (e) afirmar no solamente que los hombres pueden sino que también deben usar la lógica (los principios del razonamiento válido) para poder entender las declaraciones explícitas de la Biblia. (f) afirmar que lo enseñado implícitamente por la Biblia es tan divino y obligatorio como lo que se enseña explícitamente. (g) afirmar que “las Leyes del Pensamiento” (identidad, medio excluido y contradicción) son verdaderas.


#La lógica es el eje del pensamiento crítico y es extremadamente útil para sacar a la luz el error y establecer la verdad.  Hay principios en la lógica y nos gustaría presentarle a Usted las primeras tres leyes de la lógica las cuales son muy importantes:

  1. La Ley de la Identidad. 
  2. La Ley de la No Contradicción. 
  3. La Ley del Medio Excluido. 
     La ley de la identidad establece que A es A.  En otras palabras, algo es lo que es.  Una manzana es una manzana.  Si algo existe tiene una naturaleza, una esencia.  Por ejemplo, un libro tiene una portada y una contraportada con páginas en su interior.  Un automóvil tiene cuatro ruedas, asientos, puertas, vidrios, etc.  Un árbol tiene ramas, hojas, un tronco y raíces.  Esto también significa que cualquier cosa que exista tiene características.  Reconocemos lo que algo es al observar sus características.  Usted sabe que un árbol es un árbol debido a que ve sus ramas, sus hojas, su tronco, etc. 

     Aún más, si algo tiene una identidad, no puede tener otra, ya que ésta es única e individual.  En otras palabras: Si algo existe cuenta con una serie de atributos que son consistentes consigo mismo.  Este algo, no tiene un conjunto de atributos que sean inconsistentes consigo mismo.  Por lo tanto, podemos fácilmente concluir, que un gato no es un paracaídas.  Una manzana no es un automóvil de carreras y un árbol no es una película.

     La ley de la no contradicción nos dice que A no puede ser tanto A y ninguna A al mismo tiempo y en el mismo sentido.  En otras palabras: algo, como una declaración no puede ser al mismo tiempo tanto verdadero como falso y del mismo modo.  Con frecuencia usamos la ley de la no contradicción en discusiones y debates ya que somos capaces de reconocer cuando algo es contrario a sí mismo.  Si le dijéramos a Usted que ayer alguien fue de compras y más tarde le dijéramos que ese alguien no fue de compras, Usted nos corregiría diciéndonos que existe una contradicción.  Una contradicción ocurre cuando una declaración excluye la posibilidad de otra y aun ambas afirman ser verdaderas.  Ya que sabemos que ambas no pueden ser verdad, vemos entonces, una contradicción.  Basados en este principio, podemos concluir, que la verdad no se contradice a sí misma.  Este es un concepto muy importante.  Vamos a repetirlo: "La verdad no se contradice a sí misma."

     La ley del medio excluido dice que una declaración es verdadera o falsa.  Por ejemplo: "El cabello de esa mujer es castaño."  Es verdadero o falso que el cabello de esa mujer es castaño.  Otro ejemplo: La declaración "Estoy embarazado", es verdadera o falsa. Debido a quien escribe esta Lección es un hombre, no es posible que esté embarazado.  Por lo tanto, la declaración es falsa.  Si fuera una mujer, sería posible que estuviera embarazada dadas las condiciones normales del cuerpo de la mujer.  Cuando una mujer se encuentra embarazada, no existe una posición intermedia: Está, o no está embarazada.  La ley del medio excluido es importante ya que nos ayuda a tratar con absolutos y esto es particularmente importante en una sociedad donde el relativismo es promovido y las declaraciones verdaderas son negadas. 


     Por favor, revise estas tres leyes y familiarícese con estas ya que son extremadamente importantes cuando desarrollamos habilidades en el pensamiento crítico. Estas leyes, serán utilizadas a lo largo de las siguientes lecciones. #

Lo que significa ser irracional. Entre un número de cosas que significa ser alguien irracional están las siguientes. Ser alguien irracional es: (a) rechazar la Ley de la Racionalidad—es decir, rechazar la relevancia que tiene la evidencia para la conclusión. (b) renunciar a la posición de ser capaz de dar razones adecuadas (base o fundamento) para la doctrina que uno promueve y defiende. (c) afirmar que la verdad es subjetiva (no el definido cuerpo de verdad objetiva que es la Biblia), esto significaría que cada individuo, en efecto, “crea su propia verdad”. (d) afirmar que las proposiciones compuestas que involucran contradicción lógica pueden ser verdaderas —o que dos proposiciones que se oponen la una a la otra pueden ser ambas verdaderas. (e) afirmar que el uso del razonamiento válido (lógica) es antibíblico. (f) afirmar que ya que la verdad es subjetiva nadie está (o puede estar) realmente equivocado en cuanto a religión y que por consiguiente todas las denominaciones son tan aceptables ante Dios como la iglesia por la cual murió Cristo. (g) afirmar que nadie puede estar seguro de ninguna verdad (conocimiento), lo cual es una contradicción porque estaría afirmando que sabe que nadie puede saber nada. (h) afirmar que nada enseñado por implicación puede ser obligatorio para los hombres hoy en día.

La Biblia demanda que seamos racionales. Es cierto que hay hombres quienes asignan demasiado poder a la lógica y a la razón. La filosofía llamada el “Idealismo” hace esto. Pero ellos no toman en cuenta que la lógica sola no nos puede proveer contenido—ésta sólo puede ayudarnos a decidir con exactitud si la evidencia realmente garantiza una conclusión X.

Sin embargo, la correcta alternativa a este sobre énfasis en la lógica es no rechazar la lógica del todo. La “Logofobia” (temor a la lógica) no es la respuesta correcta al Idealismo. En cambio, la Biblia demanda que los hombres usen la lógica, reconociendo el papel correcto de la razón en conexión con la evidencia bíblica (1 Tes. 5:21). Es claro que en el presente hay algunos que están defendiendo el punto de vista que la lógica (los principios del razonamiento válido) tiene poca o ninguna importancia en los asuntos religiosos. Básicamente, este punto de vista sostiene que la lógica debe eliminarse de los temas espirituales y que la “fe” (un sentimiento que nada tenga que ver con la razón) es la que debe imperar. Pero este es un pervertido concepto que nada tiene que ver con la verdadera fe. Según la explícita enseñanza bíblica la fe está basada en la evidencia que Dios le ha dado al hombre (Rom. 10:17; 1:18-23). La fe bíblica no involucra un “salto a la oscuridad”—es decir, la fe no es la aceptación de una posición para la cual no se cuente con la evidencia adecuada. Ω